Durante la 2ª quincena de julio el Colectivo Arqueológico-Paleontológico de Salas, C.A.S., ha realizado una expedición a Argentina, para desarrollar su proyecto de investigación con el Museo Ernesto Bachmann, de Villa el Chocón, en la provincia de Neuquén. Los investigadores principales de este museo patagónico, Juan Canale y Alejandro Haluza, ofrecieron a los salenses en 2009 el estudio conjunto de un ejemplar de dinosaurio rebaquisáurido semicompleto. En varias jornadas de trabajo en El Chocón se analizaron los caracteres
En varias jornadas de trabajo en El Chocón se analizaron los caracteres anatómicos de ese dinosaurio con el fin de reconstruir sus relaciones evolutivas con otros dinosaurios, e intentar definir una especie nueva a partir de las singularidades que presenta. Asimismo, el estudio se ha extendido a otro rebaquisáurido que posee detalles anatómicos inusuales. El interés de estos ejemplares es grande, fundamentalmente porque los rebaquisáuridos siguen siendo un grupo que plantea muchas preguntas a los paleontólogos, de modo que los nuevos descubrimientos ayudan en gran medidas a hacer un “retrato” más completo y real del grupo. Pero también es resaltable que la nueva especie burgalesa, Demandasaurus darwini, es la única de los rebaquisáuridos descrita en Europa (y por extensión en Laurasia o el gran continente del Norte del pasado, formado por Norteamérica, Asia y Europa). Demandasaurus tiene como parientes más próximos a Zapalasaurus de Argentina, y Nigersaurus de África, lo que hace que el dinosaurio del Museo de Salas de los Infantes sea una pieza clave para la comprensión del origen y evolución de los rebaquisáuridos.
En este contexto, los dos grupos de paleontólogos, salenses y argentinos, han planificado la publicación de dos trabajos de investigación en revistas especializadas. Este proyecto internacional supone un refuerzo y un reconocimiento importantes de la capacidad investigadora del CAS, y una proyección más allá de nuestras fronteras del rico patrimonio paleontológico de la Sierra de la Demanda, que ya es reconocido mediante las múltiples citas de los dinosaurios burgaleses que aparecen en publicaciones científicas de todo el planeta.
Como complemento al objetivo principal del viaje, los componentes del CAS han visitado varios museos de paleontología y Ciencias Naturales argentinos. En unos casos se trataba de instituciones de largo recorrido, museos centenarios de enorme prestigio como el Museo de Ciencias de La Plata, o el Museo Bernardo Rivadavia, ambos en la provincia de Buenos Aires. En ellos se albergan ejemplares de distintas especies de dinosaurios hallados en Argentina, así como amplias colecciones de seres vivos actuales o fósiles. Por sus salas pasan anualmente cientos de miles de visitantes, que demuestran que la difusión del conocimiento y la transmisión de la cultura son unos de los valores más importantes que aprecia la sociedad.
En el Museo de La Plata los salenses se han dedicado al estudio de saurópodos, especialmente los dinosaurios Neuquensaurus y Argyrosaurus, custodiados en sus laboratorios, donde fueron recibidos por el Dr. Alejandro Otero.
Un tercer museo paleontológico, el Egidio Ferruglio, de Trelew, en la provincia de Chubut, acogió a los salenses de la mano del Dr. José Luis Carballido. En él se analizaron los restos de Brachytrachelopan y Chubutisaurus, también dinosaurios saurópodos. La Fundación del mismo nombre tiene desde hace muchos años proyección internacional por las exposiciones temporales que gestionan en distintos continentes, y especialmente en Europa. Esta actividad de estudio refuerza los conocimientos y la formación de los investigadores salenses, además del intercambio de información que supone el contacto directo con los paleontólogos argentinos.
También en el campo de la formación, el CAS prestó atención a la preparación, consolidación y conservación de los fósiles. De hecho, en Villa El Chocón Rubén Contreras, un miembro de la expedición burgalesa, realizó un magnífico trabajo de preparación de un hueso fosilizado clave para el estudio que se va a realizar.
El balance de este viaje es muy positivo. El proyecto de investigación hispano-argentino resulta muy estimulante y productivo para los dos equipos investigadores, y sirve de revulsivo para la difusión científica del patrimonio paleontológico serrano. En épocas de dificultad económica como la que estamos atravesando, se hace necesario incidir en la investigación como forma de impulsar la divulgación y el turismo cultural. En la financiación del proyecto participa de manera importante la Fundación para el Estudio de los Dinosaurios de Castilla y León, promovida por el ayuntamiento de Salas de los Infantes, y en cuyo Patronato se integran la Diputación de Burgos, Caja Burgos, Caja Círculo, CAS y Museo de Dinosaurios.